lunes, 5 de diciembre de 2011

Kyle

Kyle era atractivo, y sus labios, conscientes de ello, jugaban a inventar palabras de amor  ante los oídos de  los demás, sin importar si eran hombres o mujeres.

Casi nunca despertaba en una misma cama, le gustaba nadar entre sábanas desconocidas de color marfil o chocolate, y sumergirse en aquellas verdes y rojizas. Adoraba oler cada uno de los distintos perfumes impregnados en ellas al amanecer, rozar la piel del otro con las puntas de sus pies y besar labios con sabor a miel que, luego, al desayunar, mezclaba con una taza de café.

Sus oídos, desde su niñez, se habían acostumbrado a recibir piropos de forma gratuita y, como agradecimiento, en los paseos por las grises calles londinenses, sus ojos verdes regalaban cálidas miradas que parecían prometer amor eterno. Una quimera que reforzaba al ofrecer su cuerpo a aquél o aquella que, tras un  costoso juicio, fuesen dictaminados merecedores de tal fruto codiciado. 


Compartía lo único que poseía con los demás. Se sentía bien por ello, y de tal forma, lograba olvidar las noches húmedas y solitarias en su hogar, donde solía amanecer rodeado de  envases de comida basura de la noche anterior y con un conocido sabor a Coca-cola reseca en la punta de su lengua. En estas mañanas marginales, con las pupilas perforadas, se levantaba directo a la ducha para sentarse en ella y dejar el agua caer sobre su cuerpo cansado y desnudo, mientras que, con una mano, agarraba a tientas algún cigarro de un paquete de tabaco olvidado en el suelo de azulejos blancos debido al placer que le ocasionaba sentir el agua sobre su piel a la vez que la nicotina se abría paso por su paladar y el humo recorría su áspera garganta. A esas alturas, intentar que el cigarro no se mojase se había convertido en un pequeño reto que cada mañana sobrepasaba con éxito. Al terminar, siempre apagaba la pequeña droga retorciéndola contra la mampara amarillenta, para después, envolverse con el albornoz y echarse sobre su cama con sabor a sexo añejo.


De vez en cuando, tirado en el lecho, recordaba a las personas con las que, alguna vez, había acordado tácitamente darse calor mutuo como táctica defensiva frente el tiempo invernal, pero que, sin embargo, no le conocían en realidad. A pesar de haber probado todos los recovecos de su  anatomía, Kyle estaba seguro de que nunca sabrían que, en días como éstos, le gustaba dormir sin calcetines, leer el periódico The New York Times, y que su sonrisa, aparentemente hermosa, era, a su vez, triste y amarga como reflejo fiel de toda una vida sin haber amado.


5 Diciembre 2011

7 comentarios :

  1. alaaa qué pasada de blog Ángel! muy diferente desde la última vez, para mejor, me gusta la música que has puesto!

    Esta entrada es superbonita, cuenta una historia muy simple de la manera más bonita posible, has conseguido que un personaje vulgar como Kyle, que se acuesta con cualquier cosa que se mueve y su pasatiempos son los cigarros y la coca-cola parezca casi un dios hahaha, bueno, entiéndeme no en un dios pero sí en... un objeto de deseo (?) es el don de la palabra que tienes! Se puede hasta saborear la historia, en esta entrada, no sé si aposta o no pero todo hace relación al sabor y a los labios y eso es muy bonito :)

    Creo que voy a dejar el blog abierto solo para poder seguir escuchando la música hahaha!

    ~MArina~

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  2. Que bonito Ángel! :)

    Cada vez escribes mejor. Me encanta la historia y la música pega! :)

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  3. -Adrián J. :)
    Respaldo sin ambages el primer comentario ^^
    ¿Te has fijado en que las descripciones tan detalladas que utilizas son una característica propia de tus relatos?. Es inevitable no imaginarse a los personajes que describes, aunque bueno, en mi cabeza los idealizo más físicamente.
    Me ha gustado mucho. Ah, lo olvidaba, cuando apreté al enlace de esta página y escuché de repente "River flows in you (Yurima)" me quedé súper asombrado, porque se nota que cuidas cada detalle para que tanto el relato como la estética de la página tengan una relación; porque, está claro que para crear un ambiente, se necesitan muchas cosas.
    Enhorabuena Ángel, me alegro mucho de que escribas tan chachi :)

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  4. Me gusta mucho. Es muy sutil y muy delicado. Me gusta lo trabajado que parece el personaje y lo tierno que consigue resultar. La estructura del relato es muy buena. Abundan las frases largas y complejas como a mí me gustan y eso te obliga a meterte de lleno mucho más en la historia y a concentrarte mientras lees. Complejidad extrapositiva:)

    Ahora vienen las críticas:

    Has mejorado la puntuación y la colocación de las comas tú solito, así que ni que decir queda que, en ese aspecto, has evolucinado tremendamente. No obstante, voy a seguir apretándote un poquito las tuercas. Tus deberes para el próximo relato serán los siguientes:

    1. Hay adjetivos que sobran. Por lo menos, a mí me sobrarían. Dejo en tu mano decidir cuáles sí y cuáles no. (nocoña)
    2. Que no sea mi querida Meghanne la que te inspire un personaje atormentado que se mete a mil en la cama (coña)
    3. Que no me copies el estilo, pijo! (mediocoña)

    "River flows in you" fue la canción que elegí en un primer momento para la última entrada de Loving Meghanne Bynes en mis Amaneceres, pero me decanté por una que te recomiendo enormemente porque la letra pegaba más: "Thousand years" de Christina Perri. Aunque, la verdad, es que yo entro en tu blog para poner "Never Think" tengas o no tengas texto nuevo. La escucho cuando estoy con Mariana muy a menudo y me recuerda a ella, así que cuando no está conmigo, me la pongo.


    En fin, pequeño escritor(saltamontesmentepollo)un besazo y hasta el próximo texto que tenga el honor de comentar.

    Au revoir!

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  5. Hola ángel! ya hace tiempo que me mandaste el enlace pero por unas cosas o otras, no lo he podido leer hasta ahora. Bonito nombre, y en cuanto a la historia, me gusta mucho,has descrito muy bien al personaje, y la música genial, por cierto de quien es la primera canción de piano que suena?.

    Un saludo! :D

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  6. Gracias por pasarte y comentar ME!
    La canción se llama "River flows in you" de Yiruma. Un beso! :)

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